Hoy no ha sido un día muy productivo.
He tomado algunas cervezas y ningún cóctel por ser demasiado caros.
En el garito en el que he estado regalaban condones y he comprobado que la gente cree que va a tener sexo nada más atravesar la salida por llevar uno en la cartera. Y la leyenda ésa de que la noche que no llevas lo necesitas, es jodidamente mentira; porque yo llevo veinte años saliendo de casa sin chubasquero y nunca me ha asaltado ninguna chavala en el metro pidiéndome descendencia.
A lo mejor es porque soy un tipo poco agraciado y un poco desgraciado.
He tomado algunas cervezas y ningún cóctel por ser demasiado caros.
En el garito en el que he estado regalaban condones y he comprobado que la gente cree que va a tener sexo nada más atravesar la salida por llevar uno en la cartera. Y la leyenda ésa de que la noche que no llevas lo necesitas, es jodidamente mentira; porque yo llevo veinte años saliendo de casa sin chubasquero y nunca me ha asaltado ninguna chavala en el metro pidiéndome descendencia.
A lo mejor es porque soy un tipo poco agraciado y un poco desgraciado.
En el autobús de vuelta casa he estado pensando, sentado justo detrás de un abuelo con un gorro de ir a cazar osos. Y me he acordado de que hoy he tenido en mis manos un disco tuyo, querido Bobby. Y no lo he comprado.
Todo el mundo tiene un precio y el tuyo era nueve noventa. Que no es mucho para un escritor de tu talla. Pero mira.
Y te han ganado la partida una bolsa de patatas fritas, sopas enlatadas Campbell y un bote de suavizante.
Era un precio mucho más barato de lo que cuesta lo que tengas que decirnos, en un aeropuerto. Pero aún así las sopas se han venido a casa conmigo y tú te has quedado sentado al lado de Leonard Cohen en unos grandes almacenes de las afueras de Estocolmo.
Dice Diego A. Manrique, que es el mejor crítico de música que hay en la península ibérica y parte del extranjero, que sólo hay dos escritores que se han metido a cantantes. Y son los dos ésos que os he contado que duermen ahora mismo cogidos de la mano con pegatinas amarillas de nueve noventa en la cara.
Y en esto ha llegado mi parada. Y tengo una buena noticia.
La próxima vez que te vea te compro.
Y es que todo el mundo tiene un precio.
Incluso tú, Bob.
2 comentarios:
"porque yo llevo veinte años saliendo de casa sin chubasquero y nunca me ha asaltado ninguna chavala en el metro pidiéndome descendencia"
yo no estoy tan de acuerdo con esa frase...
Que wapo sale bob en esa foto (no se le ve la cara;) )
Compratelo/robalo y me lo pones.
La de la foto es Cate Blanchett en el biopic que han hecho sobre Bob.
Me gusta como escribes.
Dedícate a ello.
Publicar un comentario